lunes

Distribución por asignaturas en el Sistema Educativo Finlandés

Mucha gente habla del Sistema Educativo Finlandés sin tener ni idea de cómo funciona; a través de lo que han oído de otras personas o por el mero hecho de criticar nuestro Sistema Educativo. Cuesta muy poco conocer este Sistema, ya que lo podemos conocer a través de la página web del Ministerio de Educación Finlandés, que está en inglés y analizar la normativa. Con lo poco que cuesta hablar de realidades cuando las mismas se hallan tras unos documentos oficiales muy fáciles de encontrar.

Siempre nos hemos interesado por el sistema finlandés, el cual queremos importar y el cual nos parece como el marco de referencia a seguir. Pero debemos conocer también las realidades sobre lo que está sucediendo en Finlandia, las cuales no son las mismas que en España. Es el caso de la distribución por asignaturas de su sistema educativo. Una distribución que, curiosamente, choca con los intereses de algunos y que permite inferir determinadas cuestiones (entre ellas el tiempo dedicado a las lenguas extranjeras -no hay bilingüismo- y la carga horaria de los alumnos). Algo que merece conocerse más allá de las afirmaciones más ideológicas que de realidad contrastable.

La distribución anterior es la que va de los siete años (se empieza un curso más tarde la enseñanza obligatoria que en España) hasta los 15. O, para hacer una comparación con nuestro sistema, sería la etapa que va desde Primaria hasta la ESO (que englobaría sus grados 7, 8 y 9). Por tanto, una vez establecida la premisa anterior, vamos a intentar sacar algunos datos de la distribución anterior:
  • Los alumnos no empiezan a estudiar una lengua extranjera hasta los 9 años y, no es hasta los 13 cuando se empieza a estudiar una tercera lengua. No es verdad que haya una educación bilingüe en Finlandia ya que, tal como marca su legislación, el núcleo de aprendizaje se realiza en la lengua materna de los alumnos.
  • Hasta los 9 años no se empiezan a potenciar las matemáticas. Los primeros años son para introducirse en las mismas (no para realizar un aprendizaje “a fondo” de esa materia).
  • Biología, Física, Química y Geografía van en el mismo paquete que una materia llamada Educación para la Salud. Se procura trabajar conjuntamente los ámbitos anteriores mediante bloques que van intercambiando su peso horario.
  • Religión o ética es obligatoria en los centros educativos finlandeses. Más del 90% de los alumnos se decanta por cursar religión (con más de tres alumnos de una religión se hace de oferta obligatoria en los centros educativos).
  • Historia va en el mismo paquete de algo denominado Sociología. Algo que, por cierto, no empieza a estudiarse hasta los 11 años.
  • La parte más creativa tiene una importancia básica en los primeros cursos de escolarización obligatoria. Casi el 60% del currículum se destina a Música, Plástica, trabajos manuales y Educación Física.
  • En los últimos cursos (lo que sería segundo y tercero de ESO) se da una materia de Economía Doméstica (para aprender a gestionar la economía personal). 
  • Se destaca la necesidad de potenciar las vocaciones mediante un guiado (como asignatura) en los últimos cursos donde, por cierto, también se ofrecen diferentes optativas.
Una distribución realmente curiosa. Más aún cuando la misma puede ser modificada en los centros (a nivel global o mediante individualización de la misma) hasta conseguir reducirse a 19 horas en los primeros cursos para, posteriormente, ir aumentando hasta las 30.
Además, el Sistema Educativo Finlandés se sustenta en estos pilares básicos:
1. El profesor: se considera una de las profesiones de mayor prestigio en Finlandia. Para ser profesor, hace falta estudiar una carrera de 3 años más un máster de 2 años. Sólo el 10% de los aspirantes consiguen entrar en la carrera. Para estudiar magisterio hace falta más de un 9/10 en la nota media entre el Bachillerato y la Reválida. Además, se requiere de una gran dosis de sensibilidad social,  ya que, la gente pedirá consejos al profesor sobre todo tipo de asuntos debido a su alta preparación.
2. El método Educativo: los niños empiezan a estudiar a la edad de 7 años cuando tienen madurez intelectual. Los dos primeros años de colegio, los alumnos van a clase sobre unas 4-5 horas al día y tienen pocos deberes que llevarse a casa. Hasta el curso de 6º de primaria, los niños suelen tener en la mayoría de las asignaturas al mismo maestro. Hasta el curso de 5º de primaria lo se ponen calificaciones numéricas para así, no fomentar la competencia ni las comparaciones.
Además, la relación con el profesor es muy cercana porque no hay más de 20 alumnos por clase. No se persigue la memorización, sino la curiosidad, la creatividad y la experimentación; no se quiere transmitir información sino que es más importante aprender a pensar.
Los profesores que trabajan en grupo, buscan la participación y la retroalimentación de los alumnos, además, el profesor es evaluado y recibirá feedback por parte de otros profesores más experimentados.
3. Los centros educativos: cada colegio tiene autonomía para organizar su propio programa educativo. La planificación educativa es consensuada entre los profesores y los alumnos, siendo un trabajo integrado en los niveles del sistema educativo (primaria, secundaria y universidad).
4. Cultura educativa: los finlandeses valoran la cultura luterana de la disciplina y el esfuerzo; además los padres creen que son los repsonsables de la educación de sus hijos por delante de la escuela. Es por ello que casi el 80% de las familias finlandesas suelen ir a la biblioteca los fines de semana.
5. La política educativa: el gasto en educación en Finlandia fue del 6.8 % del PIB en en año 2009 (5% en España). La enseñanza obligatoria es gratuita desde el material escolar hasta el transporte. Además existe una estabilidad en el sistema educativo debido al consenso político existente (no hay tantos cambios de Leyes como en España según el partido que gobierne). También el sistema social dota de numerosas ayudas para la conciliación familiar y laboral.
También es cierto que en Finlandia son unos pocos millones de habitantes y que tienen recursos económicos debido al peso de la industria y a la prospección petrolera y que en España vivimos del turismo y poco más, además de existir muchísimos ladrones que cobran sobres en B. No creo que tampoco sea ese el punto de partida para solucionar el problema de nuestro sistema educativo, más bien lo que tenemos que hacer es sentarnos en la mesa y proponer realidades y hechos y solucionar el problema desde la raíz en vez de parchear según el ideal de partido. Separemos la política de la educación de una vez por todas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario