Esta nueva entrada en el blog se centra en el papel e importancia que tiene el Liderazgo en la estructura educativa y en este caso en concreto el liderazgo del Director. La mayoría de artículos los cuales he revisado junto con el propuesto en clase, llegan a la misma conclusión, el liderazgo, bien entendido, del director en un centro educativo es fundamental. El consenso entre la dirección y las tareas a desempeñar, en un centro o en cualquier tipo de organziación, están claramente relacionadas en términos de efectividad, y es aquí cuando el liderazgo es pieza clave de este éxito.
Cómo podemos ver en el artículo se nos presentan las funciones y habilidades que un buen director debe de tener para poder desempeñar correctamente este papel. Sin olvidar las barreras y déficits que son intrínsecas, que no son pocas, porque desde este punto de vista estamos considerando un perfil de director muy alto, desde un punto de vista estrictamente humano. Sin duda el papel del liderazgo en un director es básico, eso pienso que no es discutible, por lo menos desde un punto de vista organizativo. Realmente el papel de un director que reuna estas características y pueda desempeñar las funciones que se le atribuyen, sin duda, influyen en el resto de escalones y componentes de un centro educativo. Aún conociéndo los beneficios atribuidos a un buen liderazgo del director, pienso que es realmente difícil encontrar a alguien que cumpla esta funciones y características que son propiamente humanas, intrínsecas a unos mismo, por lo menos desde un punto de vista general. Es este sin duda una de las barreras que plantea el liderazgo en un contexto educativo, ya que en cierto tipo de organizaciones si puede cumplir una función significativa, pero pienso que es dificil trasladarlo a las escuelas de modo significativo. Puede haber una confusión entre directivo escolar y lider. Existe bastante confusión respecto a estos términos ya que no cualquier directivo es capaz de liderar a un equipo, y no todo lider ocupa un cargo de responsabilidad.
He encontrado una investigación de la ugr sobre el papel del liderazgo y el papel del director. Os lo dejo en este enlace por si quereis echarle un vistazo.
Raúl, también soy de la opinión que es difícil encontrar a una personaje que tiene todas las características describiendo en el artículo de S. Vázquez Toledo, y que cumple todas las tareas exigentes. Pienso que lo más importante de las habilidades directivas en centros educativos es la humanidad, mejor dicho, la conciencia de siempre trabajar para sus alumnos y no en contra de ellos. Lo que estoy diciendo es que una personaje que tiene las cualidades de liderazgo, no es capaz de forma automático de llevar una institución educativa. Un director tiene la responsabilidad de que se crea un entorno adecuado en el que los alumnos pueden aprender y también encuentran un oído abierto para los problemas de sus alumnos.
ResponderEliminarYo opino que, los directores de los centros educativos, la gran mayoría, no ejerce ese papel de liderazgo. Están ahí como si fueran administrativos cuando deberían implicarse de lleno en la vida del centro, es decir, involucrarse con su alumnado y el profesorado. En mi caso, cuando estaba en el instituto, para nosotros nuestro líder era el jefe de estudios, ya que, era el que tenía contacto directo con la vida del centro y se preocupaba e involucraba de lleno con nosotros. De hecho, nunca supe quién era el director del centro, pensaba que lo mismo era el jefe de estudios porque lo veíamos como una persona con liderazgo, al que se le respetaba totalmente y lo veíamos como una gran autoridad.
ResponderEliminarPienso, que para ser el director de un centro debes de tener ese "don" que haga que todos veamos a esa persona como líder. Es como un comercial, para ser comercial no vale cualquier persona, tienes que tener esa magia que haga que el cliente caiga en sus redes; pues lo mismo la figura del director, ha de ser una persona que tenga una magia especial que se note que le guste su trabajo y no quedarse prácticamente encerrado en su despacho firmando papeles y sin involucrarse en la vida del centro tan directamente como lo hace el jefe de estudios o cualquier profesor.